Desde el Sindicato de Letrados de la Administración de Justicia SISEJ anunciamos nuestra participaciónen la jornada de paro laboral que hemos convocado el martes 13 de noviembre en nuestro colectivo profesional, y cuyo seguimiento prevemos que será muy elevado.
El Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia, antes denominado de Secretarios Judiciales, lleva diez años reivindicando la adecuación de nuestras retribuciones al aumento de competencias y responsabilidades que supuso la reforma legislativa de 2009-2010, que comenzó la modernización de nuestra vetusta administración de justicia mediante la implantación de la Oficina Judicial.
Hace un año, en el mes de noviembre de 2017, el SISEJ expuso públicamente que la vía más adecuada para la reclamación de adecuación salarial eran las medidas de conflicto colectivo que la legislación laboral ofrece para todos los empleados públicos, camino que se materializa ahora tras todo un año de movilizaciones.
Debemos recordar que nuestra posición beligerantey otras críticas supusieron que el Ministerio de Justicia de Rafael Catalá decidiera vetar al SISEJ de todas las reuniones, una exclusión insólita y antidemocrática que el Gobierno actual ha rectificado materialmente volviendo a convocar a nuestra organización.
Pero por parte del SISEJ, como organización de juristas comprometida con el servicio público, nos oponemos a plantear ante la sociedad una simple reclamación más, vacía y corporativista, nopretendemos equiparar o hacer comparaciones con las protestas de otros colectivos, ni tampoco vamos a utilizar la lícita movilización profesional para hacer oposición política al gobierno.
Somos conscientes del escenario social, económico y presupuestario en que España se encuentra, en el contexto parlamentario y el de la Unión Europea.Pero desde el SISEJ creemos que nuestra reclamación es legítima y perfectamente factible, si se emprende desde la responsabilidad y en el marco de la modernización de la administración de justicia.
En nuestros Congresos de Valencia (2016) y Madrid (2018) presentamos los datos, estudios y trabajos que avalan la necesaria reestructuración organizativa de toda la Administración de Justicia en materia de recursos humanos, un proceso que es inevitable en todo el sector público, más aún si se tiene en cuenta el escenario tecnológico actual.
Desde el SISEJ creemos los Letrados de la Administración de Justicia debemos aspirar a tener únicamente asignadas competencias y responsabilidades de dirección procesal propias de un cuerpo superior, e ir desprendiéndonos de funciones accesorias o auxiliares destinadas a ser suplidas tecnológicamente, como las relativas a la documentación o la fe pública. En el esquema de la Oficina Judicial no tiene sentido que siga existiendo ningún puesto de trabajo que relegue a los Letrados a dichas funciones en Unidades procesales de Apoyo al Juez, mientras que los Servicios Comunes (de ejecución, tramitación general, notificaciones o embargos) siguen infradotados a todos los niveles.
Junto a ello, el Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia tiene la formación y capacidad suficiente para asumir la dirección del Registro Civil, la dirección y liderazgo público de los medios adecuados de resolución de conflictos(mediación, conciliación), y para que un número significativo de integrantes de nuestro Cuerpo pueda pasar a integrarse en el Poder Judicial como “jueces de base o de primer grado”, único camino realista que permitirá implementar en un período de tiempo muy corto los Tribunales de Instancia con el aumento de jueces y magistrados necesario para ello.