El Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia ha protagonizado por primera vez en su historia de modo unitario dos jornadas de protesta frente al Ministerio de Justicia en el marco de las movilizaciones por la adecuación salarial pendiente desde 2009-2010.
El 18 de abril los Letrados de la Administración de Justicia participamos en concentraciones territoriales en las capitales de provincia y sedes judiciales, registrando una masiva asistencia de compañeros, destacando ciudades como Barcelona o València con más de un centenar de Letrados movilizados.
El 21 de abril, alrededor de quinientos Letrados de la Administración de Justicia participamos en el acto de movilización de nuestro Cuerpo más importante y significativo de toda nuestra historia, la concentración ante la sede del Ministerio de Justicia en Madrid por la adecuación salarial frente a un Ministerio que nos discrimina laboralmente.
Frente al silencio oficial, el conflicto existente en el Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia no se puede seguir ignorando y la repercusión mediática ha sido importante, destacando la cobertura televisiva por los informativos del canal La Sexta.
Recordamos que la organización y dirección de las movilizaciones por la adecuación salarial se lleva a cabo por el grupo de trabajo de adecuación salarial de la Asamblea de Letrados de Madrid, sin participación de las asociaciones de nuestro Cuerpo, y con absoluto protagonismo de muchos compañeros y compañeras sin afiliación específica.
Desde el SISEJ apoyamos esta movilización íntegramente, desde el principio y es nuestra firme voluntad hacerlo hasta la consecución de los objetivos planteados en la misma.
Tras el enorme éxito de esta protesta, el Ministerio de Justicia no puede seguir mirando a otro lado. El gabinete de Rafael Catalá debe empezar a escuchar al Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia y atender a nuestras reivindicaciones, empezando por convocar y recibir a la Coordinadora de Asociaciones, de la que formamos parte las cuatro asociaciones de nuestro Cuerpo, sin exclusiones, y cuyo apoyo también es objetivo de unas movilizaciones que no han hecho más que comenzar.
