PUBLICADO EN LA NUEVA ESPAÑA
El secretario judicial del Juzgado central de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, supuestamente responsable de la desaparición de pruebas incorporadas al sumario del 11-M, atribuyó ayer a un error la pérdida de unos clavos recogidos en la explotación asturiana de Mina Conchita, de donde presuntamente salió el explosivo usado en los atentados.
El secretario afirmó que él no tiró unos clavos recogidos como pruebas de convicción del 11-M, sino que cambió de sitio la bolsa en la que se encontraban y la persona encargada de limpiar su despacho los tiró a la basura. Aseguró que el error se produjo porque no estaban etiquetados como pertenecientes al sumario 20/04 -en el que se investigan los atentados de Madrid- y que por eso la persona encargada de hacer la limpieza los tiró. Los clavos se iban a comparar con la metralla usada en las mochilas-bomba.
El secretario, que ha pedido amparo al Colegio Nacional de Secretarios Judiciales por «acoso profesional», añadió que conoce perfectamente cuáles son los deberes de su cargo, puesto que lo desempeña desde hace quince años y que si los clavos hubieran estado identificados como piezas de convicción, es decir, referenciados con el sumario 20/04, jamás los habría cambiado de sitio.