Con ocasión del anuncio de elecciones generales para el próximo 28 de abril y el consiguiente fin de la legislatura, desde el Sindicato de Letrados de la Administración de Justicia – SISEJ queremos realizar una valoración de la misma en el sector justicia, que globalmente consideramos moderadamente decepcionante teniendo en cuenta el escaso tiempo de que se ha dispuesto para la gestión.
En primer lugar, por lo que se refiere al Ministerio de Justicia, lamentamos que se haya mantenido la inercia existente en la legislatura anterior y en el comienzo de esta. Además de mantener a una parte de cargos del equipo anterior, lamentamos que no se haya emprendido ninguna iniciativa de carácter estratégico ni de consenso político para avanzar en la modernización de la administración de justicia, en especial la tecnológica y organizativa.
Desde el SISEJ queremos reconocer que por el gabinete de Dolores Delgado se haya vuelto a convocar a nuestra organización a las reuniones, traslados y encuentros de trabajo, rectificando materialmente la política represiva contra nuestra organización que llevó a cabo desde el anterior Gobierno. No obstante, el Ministerio de Justicia ha sido requerido formalmente por segunda vez y con carácter urgente por el Defensor del Pueblo para dar explicaciones por escrito respecto a la exclusión del SISEJ, contestación que sigue pendiente.
En cuanto al sector de los Letrados de la Administración de Justicia, aunque ha existido mayor diálogo y mejor predisposición que en la etapa anterior, constatamos que no se ha producido ningún avance material en ninguna de nuestras reivindicaciones: adecuación salarial a las competencias atribuidas a partir de 2010, un nuevo reglamento orgánico y una reorganización profunda del Cuerpo, que sigue desaprovechado a todos los niveles.
Por último, nos parece muy criticable el, a nuestro juicio, sesgo excesivamente corporativo que se ha dado desde este Ministerio de Justicia respecto a la carrera judicial y fiscal. Las instituciones políticas democráticas deben gobernar en interés de toda la ciudadanía, y esa y no otra debe ser la misión de quienes ocupan los puestos de responsabilidad, que se deben a un Gobierno y no a los intereses profesionales de un colectivo en especial. Este sesgo nos parece especialmente inapropiado en un escenario en el que miles de personas siguen atrapadas en los retrasos procesales inaceptables y los laberintos burocráticos sin corregir de una justicia alejada de la ciudadanía, que no funciona, y que sigue a merced de ocurrencias improvisadas, como por ejemplo la de los juzgados especializados conocidos como de cláusulas suelo.
Desde el SISEJ esperamos y confiamos en que desde el Gobierno se corrija el rumbo en las cuestiones indicadas y se tome un nuevo impulso a la modernización de la justicia.
Sindicato de letrados de la Administración de Justicia
18 de febrero de 2019
